Firma electrónica vs firma manuscrita: ¿Cuál es más segura y útil?

En la era digital, las firmas son una parte fundamental de las transacciones comerciales. Ya sea que estés cerrando un contrato, validando un acuerdo o simplemente autenticando tu identidad, la firma correcta puede marcar una gran diferencia. En este contexto, existen dos firmas primordiales: la manuscrita y la electrónica. ¿Pero cuál es más segura y práctica?

1. ¿Qué es una firma manuscrita?

La firma manuscrita, un símbolo que ha prevalecido durante siglos, denota la identidad y la intención de una persona al firmar un acuerdo. A pesar de ser legalmente vinculante y reconocida en tribunales, presenta desventajas como ser fácilmente falsificable, la lentitud de su obtención y los desafíos de su almacenamiento. Sin embargo, sigue siendo una opción sólida para autenticación.

Es crucial recordar que no todo dibujo en un documento digital se considera firma manuscrita.

2. ¿Qué no es una firma manuscrita?

Escaneos de documentos firmados o la simple inserción de una imagen de una firma en un archivo no equivalen a una firma manuscrita legítima. A pesar de ser digitalizaciones, carecen de la autenticidad y la veracidad del original.

Para maximizar la validez legal, algunos documentos requieren firmas en cada página o incluso firmas adicionales para las modificaciones. Es crucial entender esta distinción para no caer en falsas equivalencias.

3.¿Qué es una firma electrónica?

A diferencia de la firma manuscrita, la firma electrónica es una herramienta digital legalmente vinculante para autenticar documentos online. Esta puede manifestarse de diversas formas: un nombre mecanografiado, una casilla de "Acepto", o incluso una firma digital. La clave es que, detrás de esa representación, exista una autenticación y consentimiento inequívoco del firmante, como lo garantiza Signaturit.

Con la comodidad y seguridad que ofrecen, no es sorprendente que las firmas electrónicas estén ganando terreno sobre las manuscritas.

4. Ventajas de la firma electrónica

1- Mayor seguridad: Procesos de autenticación como la biometría y la verificación por correo electrónico garantizan la identidad del firmante.

2- Eficiencia: La firma electrónica agiliza las transacciones al eliminar la necesidad de impresiones y envíos físicos.

3- Reducción de costes: Evita gastos asociados a la impresión y envío de documentos, y acelera el proceso de firma.

5. ¿Que firma es más segura la manuscrita o la digital?

Ambas firmas tienen sus ventajas y desventajas, pero si hablamos estrictamente de seguridad, la firma digital supera a la manuscrita en muchos aspectos. Ofrece protección contra falsificaciones y garantiza que el documento no ha sido modificado después de ser firmado. Mientras que la firma manuscrita ha sido el estándar durante mucho tiempo, la transición hacia un mundo digital hace que la firma digital sea más relevante y, en muchos casos, más segura para transacciones en línea y electrónicas.

Si bien la firma manuscrita ha sido, durante mucho tiempo, el pilar de la autenticación y ha llevado con orgullo la marca de nuestra identidad individual, presenta desafíos en términos de falsificación y practicidad en el entorno actual. Por otro lado, la firma electrónica, respaldada por tecnologías de autenticación robustas, no solo promete seguridad, sino también eficiencia y reducción de costos. Mientras que la elección entre ambas puede depender del contexto y las preferencias individuales, es evidente que, en términos de seguridad y conveniencia para transacciones en línea, la firma digital tiene la ventaja. En resumen, en la intersección de tradición y tecnología, es fundamental que los individuos y las empresas estén informados y elijan la opción que mejor se adapte a sus necesidades en el cambiante paisaje de la autenticación.